Ubicada en lo alto de un cerro, ofrece una vista panorámica de la ciudad. Su fachada colorida y su interior acogedor la convierten en un punto de referencia cultural y espiritual. Es necesario subir 79 escalones para llegar a ella.

Antigua casa de los exploradores Frans Blom y Gertrude Duby, este museo es un centro cultural dedicado a la protección de los lacandones y la investigación de la cultura maya. Su nombre en tzotzil significa "Casa del Jaguar".

Ubicado en el ex-convento de Santo Domingo, este museo exhibe la rica historia y diversidad cultural de los pueblos indígenas de los Altos de Chiapas. Preserva valiosas obras creadas entre el siglo XVII y mediados del XIX.

Con su impresionante fachada barroca y su interior ricamente decorado, es uno de los ejemplos más notables de la arquitectura colonial en México. En su interior destaca un púlpito labrado en una sola pieza de roble.

Presenta una fascinante colección de ámbar chiapaneco, con piezas que contienen insectos y plantas fosilizadas. Se encuentra en lo que fue el convento de La Merced, un edificio con mucha historia propia.

Conocida por su estilo neoclásico y su ambiente tranquilo, es un refugio de paz en el corazón de la ciudad. Fue el primer convento fundado en la ciudad en 1537, lo que le otorga un gran valor histórico.